05 mayo 2010

¿YA ESTABAN AQUÍ?




Normalmente siempre que hablamos de vida Extraterrestre tenemos en mente la típica imagen de una criatura verde o grisácea de brazos alargados con un tamaño de cabeza y ojos ligeramente grandes o desproporcionados, pero desde hace ya algún tiempo mentes como la del Físico teórico y Cosmólogo de la Universidad Estatal de Arizona, Paul Davies, nos ofrece otra perspectiva sobre este apasionante campo.

Hasta ahora para buscar vida extraterrestre los científicos han estado tratando de localizar señales de radio a través de la vasta inmensidad del espacio exterior, con la esperanza de hallar alguna que demuestre su existencia, pero desde hace ya algún tiempo mentes como la de este científico van más allá y plantea que es posible que existan evidencias de vida E.T. en nuestro mismo planeta.

Para este refutado científico del cual se está teniendo noticias gracias a la cantidad de conferencias, libros y artículos de divulgación científica ofrecidos (como por ejemplo a través de la revista Scientific American), existe la posibilidad de que formas de vida alternativas (E.T.), posiblemente microbianas, puedan estar más cerca de nosotros mismos, de lo que llegamos a pensar…



El prestigioso científico ya nos hablaba en el 2007 sobre la posibilidad de una convivencia con células de origen extraterrestre.


El cosmólogo explica en una conferencia dada en la prestigiosa academia oficial de ciencias británica que, “Apenas hemos raspado la superficie del mundo de los microbios”.


También plantea la posibilidad de que la vida puede haberse desarrollado en la Tierra no una, sino en barias ocasiones.


La astrónoma americana Jill Cornell Tarter, buscadora incansable de señales de otras civilizaciones, fuente de inspiración para el personaje principal de la novela “Contacto” de Carl Sagan y que actualmente ocupa el cargo de Bernard M. Oliver como directora de SETI

(Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre), comenta que la idea de búsqueda de microorganismos alienígenas en la Tierra, se viene debatiendo desde hace ya algún tiempo y que varios de los científicos involucrados en el Proyecto SETI están interesados en el estudio de esta posibilidad.


¿Estamos solos en este vasto universo? Bueno, de ser así, sería un terrible desperdicio de espacio, nos comentaba entre muchas otras cosas interesantes Jill Tarter en su entrega del premio TED (Technology Entertaiment Design) del pasado año 2009.


Son abundantes los organismos con rasgos excepcionales, pero, ¿Cómo de inusuales tienen que ser éstos según la ciencia para ser catalogados como tal?

Según Davis para que esto suceda, estos organismos tendrían que estar compuestos de elementos exóticos que ninguna otra forma de vida conocida pudiera tener. Y que aunque todavía no se “conocen” organismos de estas características, cabe señalar que menos del 1% de las bacterias del mundo han sido estudiadas de forma intensiva, lo que deja muchas opciones (sic).

Resulta que ya los medios de comunicación, hace algo más de cuatro décadas, hacían mención de un fatídico riesgo de contaminación exobiológica.

De hecho la NASA comenzó a trabajar con sus naves espaciales procediendo a su ensamblaje en espacios esterilizados y preparando las superficies de las piezas para evitar la contaminación de éstas con posibles agentes patógenos.

Y si lo que querían es una prueba de la existencia exobiológica recuerden ustedes la polémica suscitada tras la noticia ofrecida por la agencia espacial estadounidense NASA el 07 de agosto de 1966 tras el análisis del meteorito procedente de Marte descubierto en la Antártida (ALH84001 abreviatura de su nombre oficial Allan Hills 84001).


Fotografía de dicho meteorito junto con un corte transversal de ésta para su análisis posterior (ALH84001)


Este meteorito fue descubierto el 27 de diciembre del año 1984 en una zona de la Antártida llamada Allan Hills, la cual da nombre a esta (Diogenita) de color marrón cuya masa ronda los dos kilogramos de peso (1931 g) y que fue descubierta por el equipo perteneciente al Programa de Búsqueda de Meteoritos Antárticos de los EE.UU. (ANSMET). Pues bien, toda

esta polémica se produjo tras el análisis ofrecido por la NASA diciendo que habían descubierto huellas de microorganismos fósiles en dicho meteorito mientras que otros expertos decían que esas huellas microscópicas encontradas eran de origen geológico y no bacteriológico.


Imagen microscópica de una sección del meteorito ALH84001 ¿Huellas microscópicas de origen geológico, o bacteriológico?....


Pero recientemente miembros del Johnson Space Center (JSC), entre ellos Kathie Thomas-Keprta lincenciada en bioquímica, presentaron un nuevo y detallado estudio sobre el meteorito ALH84001 que fue publicado en la revista “Geochimica et Cosmochimica Acta”.

Donde entre otros muchos datos técnicos, este informe nos habla de la posibilidad de que el material magnético encontrado en el ALH84001 sea de origen alóctono. Para ello Thomas-Keprta explica que estos minerales ferro-magnéticos encontrados han sido producidos por bacterias que viven en medios acuáticos y que a groso modo esto se produce cuando los recubrimientos de estas bacterias se degradan debido a su muerte y posteriormente una cadena de magnetita es liberada en al medio ambiente.

En lo concerniente a vida extraterrestre inteligente, el conocido astrofísico Stephen Hawking, ha comentado recientemente en una serie de televisión que emite el canal de “Discovery Channel”, que es muy razonable pensar que exista vida inteligente fuera de la Tierra. Pero piensa que estos seres tan solo vendrán en busca de recursos y que luego se irían. Y digo yo,¿esto no ha venido sucediendo desde hace cientos o quizás miles de años?... (Cursiva del autor del artículo).


Astrofísico Stephen Hawkin,nos da una imagen terrorífica de lo que sería la llegada de vida extraterrestre a nuestro planeta...


Cuenta que para él la llegada de estos seres extraterrestres sería muy parecida a la llegada a América por parte de Cristóbal Colón, un encuentro en el cual los nativos no fueron los más beneficiados.

Por lo tanto el profesor Hawking cree que la comunicación directa con seres extraterrestres debería evitarse a toda costa haciendo una comparativa en la cual a su entender, las personas solo tendrían que observarse a sí mismas para darse cuenta de cómo una entidad inteligente puede tornarse en algo que no se quisiera conocer. De nuevo poniéndose a los extraterrestres como los malos de la película…

Y como conclusión final explica que para su cerebro matemático, solo los números le hacen creer en la posibilidad de tal existencia, aunque probablemente la mayor parte de la vida en otras partes de los confines del universo será en forma microbiana. ¿Y hace falta creer en cálculos matemáticos para demostrar la vida extraterrestre?,¿Qué ocurre con la gran cantidad de reportes sobre visitas a nuestro planeta por parte de estos seres?, ¿Es que todas las personas de este mundo que han realizado este tipo de reportes sobre estos seres están equivocadas?...

Se dan cuenta; estamos hablando de que los científicos ya estaban teniendo en cuenta la posibilidad de la existencia exobiológica varios años antes de que el hombre llegara a pisar tan siquiera la Luna y sin embargo debido a las recientes noticias parece que esto es un tema totalmente nuevo dentro de la actualidad científica. Donde encima nos dicen que tan solo los cálculos numéricos pueden “demostrarnos” posiblemente, la existencia de vida extraterrestre, ¿Hasta cuándo pretenden tenernos “engañados”?.


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